Los aficionados del PSV Eindhoven se han posicionado en contra del uso de la red Wi-Fi en su estadio durante los partidos. En el último encuentro disputado se desplegaron pancartas criticando esta medida por provocar que los hinchas no animen a su equipo al estar navegando en Internet.
La dependencia cada vez mayor que tenemos a permanecer en todo momento conectados, unida a las facilidades que nos van brindando los diferentes dispositivos electrónicos hace que sea muy fácil ver en cualquier lugar público a una persona manejando una tableta o un teléfono móvil inteligente. En las ciudades, con vistas a ofrecer a sus habitantes una mejor red de infraestructuras, se van creando redes Wi-Fi y puntos de para que los ciudadanos pueden conectarse a Internet desde cualquier punto, tengan o no una tarifa de datos móviles contratada o activada.
Los estadios de fútbol, al igual que cualquier otro lugar público, no son sitios que se libren de las escenas de personas consultando su smartphone o tablet. No obstante, en estos lugares tan masificados, las redes de datos 2G, 3G y 4G suelen saturarse y muchas veces son los propios clubes deportivos los que optan por instalar los equipos adecuados para proporcionar a sus aficionados conexión a Internet mediante redes inalámbricas.
La semana pasada, tal y como nos contaban en Móvil Zona, el Manchester United anunció la prohibición de entrar en su estadio con tablets, laptops, phablets y otros gadgets de dimensiones superiores a 150 mm de largo por 100 mm de ancho. Desde el club inglés alegaron razones de seguridad para tomar esta decisión, ya que se trataría de evitar el lanzamiento de objetos al terreno de juego. Puede que de fondo existan otros motivos como sería evitar la grabación del evento deportivo en cuestión por motivos de derechos televisivos, ya que suena inverosímil que alguien vaya a lanzar a un jugador rival una tableta de varios cientos de euros.
¿Estáis a favor o en contra de la instalación de Wi-Fi en los recintos deportivos?