Hace tiempo que el teléfono móvil dejó de utilizarse únicamente para comunicarnos ya sea mediante llamadas de voz o a través de mensajería. La era de los smartphones ha traído consigo numerosos avances que hacen aún más fácil la vida de las personas. Entre los nuevos usos que se le pueden dar al móvil, cada vez resulta más popular usar la tecnología NFC para pagar en algún comercio, restaurante o establecimiento de cualquier tipo.
Con el auge de sistemas como el NFC (presente en multitud de dispositivos móviles) o el reciente Apple Pay que se espera que llegue a los productos de Cupertino por estas latitudes a lo largo de este año, los fabricantes saben que el pago con el móvil es un tren que no pueden perder. Y es que la tecnología less pisa fuerte y además supone una clara comodidad para los s.
Dónde se puede pagar con el móvil
España es uno de los países donde más han crecido el pago y las transacciones “sin o”. Según datos de MasterCard, uno de los principales proveedores mundiales de productos financieros como tarjetas bancarias y datafonos, más de 600.000 puntos de venta en nuestro país ofrecen ya esta solución como forma de pago. Supermercados, restaurantes, transporte, cada vez son más las opciones disponibles a nuestro alrededor. Este crecimiento ha supuesto multiplicar por 12 el número de operaciones less realizadas en 2013 en nuestro país. La tendencia se repite a nivel mundial donde a finales de 2014 ya existían 3 millones de establecimientos en todo el mundo que han sido adaptados a esta tecnología, casi un 56% más que en el ejercicio anterior.
Pagar con el móvil no es algo nuevo, la operadora Vodafone ya inició hace un par de años la campaña de Vodafone Wallet para popularizar esta opción de pago mediante la tecnología NFC (Near Field Communications), que está presente en muchos móviles y que permite pagar a través de una pasarela de pago bancaria en un punto de venta simplemente con acercar el teléfono al terminal de venta.
Las entidades bancarias son las principales artífices de este negocio y obviamente son las que se han dado más prisa en desarrollar y adaptar aplicaciones para permitir usar nuestro móvil como “monedero”. Las alianzas entre entidades bancarias y operadoras, como el proyecto conjunto iniciado entre el Banco Santander y Orange, o las posibilidades que ofrecen servicios como BBVA Wallet, o CaixaMóvil Store, hacen posible elegir desde qué tarjeta o cuenta bancaria queremos pagar el servicio o producto adquirido.
Y cada vez son más las compañías que quieren formar parte de la tecnología del pago mediante móvil o tarjetas less, y un buen ejemplo es el desarrollo de Google Wallet por parte de la empresa de Mountain View. En otros ámbitos, la cadena valenciana de supermercados Mercadona, llevó a cabo a finales del año pasado un proyecto propio para instalar 16.000 terminales de cobro adaptados al pago mediante NFC.