No sólo YouTube, sino también otros servicios como Netflix, impiden la reproducción de contenidos fuera de ciertos países. Lo hacen por la limitación de licencias de distribución, pero hay algunas formas de saltarse el bloqueo para reproducir todos estos contenidos sin problema alguno. Y en el caso de Netflix, que es un servicio de suscripción, la cuestión se complica ligeramente, pero con YouTube es muy sencillo.
La clave está en impedir que los servidores identifiquen dónde estamos. Es decir, impedir que YouTube sea incapaz de detectar que estamos usando la plataforma de vídeo en streaming desde España. Para ello, lo único que tenemos que hacer es camuflar nuestra dirección IP, algo que podemos conseguir con un proxy o VPN, aunque la forma más rápida y sencilla es la primera, series que podemos ver en YouTube.