AMD no sólo ha presentado una tarjeta gráfica pensada para ordenadores de gama media-alta, sino que también quieren ir a por el mercado de entrada hasta la gama alta con sus nuevas APU. La ventaja que tiene una APU frente a un procesador y tarjeta dedicados son su precio y tamaño, pero también su rendimiento es menor. Estrictamente, AMD siempre ha asegurado que el precio frente a un hardware dedicado es menor.
Estos procesadores inician la séptima generación de APUs de AMD, que estrenan con la presentación de 9 procesadores de muy diverso rendimiento. Lo que sí tienen en común todos son consumos muy bajos, que varían entre los 15 y 35W. Nada desdeñable para ser unas APU y el rendimiento que aportan. Actualmente, están siendo distribuidos en masa a los fabricantes de portátiles, por lo que dentro de poco empezaremos a ver portátiles equipados con estas APU. Desde AMD dicen que no están interesados ni en los drones ni en los automóviles; su principal foco actualmente se encuentra en el PC. El año pasado las ventas de los procesadores APU bajaron un 4.3%, pero aumentaron un 30.3% las ventas de portátiles equipados con estos procesadores, por lo que tiene sentido que se hayan centrado en equipar los máximos portátiles posibles con estas APU.
Estos procesadores soportarán la nueva ram DDR4, que empezaremos a ver en los portátiles de gama media este año. Soportarán hasta 2400 Mhz. Todas soportarán el nuevo códec VP9 y H265/HEVC, hasta 4K, por lo que disfrutaremos de experiencias fluidas en esta resolución en Youtube y Netflix. En cuanto a la duración de batería, en AMD aseguran que la batería durará más de 8 horas.