En España siempre ha existido la creencia generalizada de que pagamos el peor Internet al precio más caro de Europa. Esta es una realidad difícil de cambiar de cara a los s pese a que no es del todo cierta. Nuestra red ha evolucionado mucho en los últimos tiempos, aunque es posible que los precios no lo hayan hecho de la misma forma. Por todo ello, vamos a recoger las conclusiones de un estudio sobre los precios de la fibra en los principales países de Europa a los que añadiremos más información para intentar contestar a la pregunta: ¿Somos los europeos que más cara pagamos la fibra óptica?
“Internet barato” es una de las búsquedas más realizadas por los consumidores. Existe una percepción general de estar pagando demasiado dinero por un servicio que ya se ha convertido casi en bien de primera necesidad. La conexión permanente a la red es algo innegociable en la sociedad actual y necesitamos estar conectados en todo momento. Para ello, buscamos las mejores ofertas, aunque no siempre se ajusten a nuestro presupuesto disponible.
fibra óptica que tenemos en España y el lugar que ocupa con respecto al resto de países de Europa. En el pasado Encuentro de Telecomunicaciones y Economía Digital que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander, el secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, Víctor Calvo Sotelo, nos dio las claves.
España tiene la red de FTTH (fibra óptica hasta el hogar) más extensa de Europa con 22,5 millones de s instalados. Para que nos hagamos una idea de la evolución en los últimos años, en 2012 teníamos únicamente 1,6 millones de s instalados. Esto ha sido posible con la inversión de miles de millones de euros por parte de las operadoras de telecomunicaciones en los últimos cinco años.
La cuota de línea
En Europa no existe, por muy extraño que nos parezca. Se trata de una polémica tasa inventada por los operadores que, además, no ha parado de subir con el paso de los años. Tenemos casos de cuotas de línea que superan los 21 euros cuando el precio era de unos 15 euros hace muy poco tiempo. Esto permite elevar el coste de las conexiones de forma poco transparente, ya que no están obligados a indicar el coste final de la conexión (únicamente el IVA). En Europa no tienen esta triquiñuela legal para subir los precios.
¿Por qué tenemos los precios más caros de Europa? Os escuchamos