El ratón es uno de los periféricos más importantes a la hora de jugar a videojuegos en PC, sobre todo en los shooter. Cuando vamos a comprar ratones gaming debemos analizar diversos factores, como la forma del ratón para que nuestra mano esté cómoda, los botones que tiene, las funcionalidades que ofrece, y lo más importante: el sensor que utiliza.
Lo primero: el precio
Mucha gente se asusta cuando dices que te has gastado 60 euros en un ratón, pero si vas a echar varias horas al día con la mano encima de él, es muy normal querer gastarte ese dinero. Ese es el precio ideal para comprarnos un ratón que ofrezca las mejores características del mercado, como puede ser el Razer DeathAdder Chroma o el Logitech G502.
En definitiva, puedes encontrar ratones aceptables por 30 euros, pero no esperes encontrar los mejores por menos de 50.
Posición de la mano
La posición que tenemos a la hora de coger el ratón no es la misma, y cambia de una persona a otra. Hay quien deja caer la mano más plana, mientras que otras personas cogen el ratón en modo ‘garra’. Unos prefieren desplazar la mano, mientras otros prefieren desplazar el brazo completo. Al final es cuestión de gustos, y vamos a analizar los distintos tipos en profundidad.
- Palma plana. Este es el modo más común, y es el que permite tener la mano más relajada. Para ejercer el movimiento, éste se hace con el brazo completo, lo cual es mejor para evitar cansancio en la mano, aunque se pierde precisión a la hora de jugar, y a no ser que ancles el brazo y muevas la muñeca, te va a costar ser preciso.
- Mano en forma de pinza. Esta es la manera más precisa para el juego de shooters que requieren una precisión milimétrica, ya que permite ser más preciso. Como ya hemos dicho, puede ser más incómoda para largas sesiones de gaming pues acaba cansando las articulaciones de la mano. Los ratones de Corsair son cortos y anchos, ideales para esta manera de coger el ratón.
- Con la punta de los dedos. Esta es una especie de mezcla entre ambas, que consiste en alejar el ratón y que éste quede sólo al alcance de la punta de los dedos. Es de las menos usadas porque es complicado ser preciso con ella, y es la que más tensión genera en la mano. Si le coges el punto, puede que llegues a ser más preciso que en el modo de pinza.
Además, un ratón puede permitir cambiar entre modos de DPI en tiempo real con un simple botón, o el G502 tiene un botón en el dedo gordo para asignarlo a una reducción temporal de la velocidad de movimiento para alcanzar más preciso a un enemigo que se encuentre lejos. Al final, lo importante de un ratón es probarlo, y si no puedes hacerlo, lee todas la reviews que puedas sobre los mismos.