La placa base es, como su nombre indica, la base sobre la que giran todos los componentes del ordenador. Es la que se encarga de que éstos puedan comunicarse entre sí, y en definitiva de que el ordenador pueda operar correctamente. Elegir una placa base depende de muchos factores, como su tamaño, precio, socket, capacidad de actualizar sus componentes, overclock, o compatibilidad con varias tarjetas gráficas. Vamos a analizarlos todos en detalle para que no os equivoquéis al elegir una para vuestro ordenador.
Tamaño o factor de forma: EATX vs ATX vs Micro-ATX vs Mini-ITX
A la hora de comprar una placa base nos encontramos con cuatro formatos: EATX, ATX, Micro-ATX y Mini-ITX, aunque lo más probable es que el primero, EATX, no lo vayamos a tener en consideración a la hora de elegir una placa base. EATX se utiliza en servidores, por lo que es raro verlo en ordenadores para consumidores. Estas placas dejan más espacio y añaden cuatro slots más para la memoria RAM y algún puerto PCI-E más a lo sumo, así que si no vas a utilizar más de cuatro módulos de RAM o vas a instalar cuatro tarjetas gráficas, es mejor que utilices ATX, que además son más baratas.
ATX (305 x 244 mm) es el factor estándar para las placas base, y es el más utilizado en los ordenadores para consumidores. Suelen traer puertos PCI-E y SATA más que de sobra para conectar unas cuantas tarjetas de expansión y unidades de almacenamiento. Si vas a comprar una caja de ordenador de tamaño normal, este tamaño es la mejor opción.
Una placa base Micro-ATX (244 x 244 mm) es más pequeña que una ATX, y suele contar con menos slots de expansión PCI para reducir el tamaño, aunque permiten conectar hasta dos tarjetas gráficas. Si vas a utilizar una tarjeta de sonido, una tarjeta de red o cualquier tipo de SSD PCI-E, puede que necesites una ATX. Sin embargo, si vas a hacer un PC en una caja más pequeña de lo normal, las placas Micro-ATX son la mejor opción. Por ello, se suelen utilizar en ordenadores de oficina o en ordenadores premontados que se venden en grandes superficies, ya que son más baratas y rinde igual para procesadores sin overclock.
chipset define la conectividad que tiene la U con el resto de componentes del ordenador. El chipset determina cómo se organizan los circuitos dentro del cuerpo de una placa base. Con cada nueva generación, se añaden más conexiones y mejoras en la velocidad.
En el caso de Intel, encontramos estos chipsets con sus respectivos sockets:
- Intel LGA1150
- Z97
- Z87
- H97
- H87
- Q87
- Q85
- B85
- H81
- Intel LGA 1151
- Z170
- H170
- H110
- Z270
- H270
- H210
La principal diferencia entre las placas base Z (como las Z270) y las H (como las H270) suele ser que estas últimas no permiten hacer overclock ni a la U ni a la memoria RAM, por lo que podemos ahorrar algo de dinero comprando un procesador sin overclock y una placa base H. Con respecto a la memoria RAM, sólo podremos alcanzar unas frecuencias de 2133 MHz para las DDR4. También suelen incluir menos conectores USB 3.0 y menos SATA.
En el caso de AMD, encontramos los siguientes chipsets con sus respectivos sockets:
- Chipsets AMD AM4 (Ryzen):
- X370
- B350
- A320
- X300
- A300
- B300
- Chipsets AMD AM3+:
- 990FX
- 990X
- 970
- 770
- 760G
- Chipsets AMD FM2+
- A88X
- A78
- A55
- Chipsets AMD AM1
Puertos traseros
La conectividad es uno de los puntos más importantes de la placa base. Los
Los puertos de vídeo es probable que no los vayas a usar si vas a comprar una tarjeta gráfica dedicada. Si por otro lado vas a usar la integrada del procesador, tendrás que usar los de la placa base.
¿Importa la marca a la hora de comprar una placa base?
En el mercado encontramos principalmente cuatro fabricantes de placas base: ASUS, Asrock, MSI y Gigabyte. Francamente, no hay ninguna diferencia de rendimiento entre elegir un fabricante u otro, ni uno cuyas placas base fallen más que otro. Elegir una placa base dependerá de tu presupuesto y de la conectividad que éstas ofrezcan. A lo mejor una placa base por 110 euros te ofrece un conector de audio óptico que una de 120 no te ofrece, u otra tiene una determinada función de software que utilizarás que otra marca no tiene.
La marca de la placa base no influye tampoco en el rendimiento de una tarjeta gráfica. Una tarjeta gráfica MSI dará el mismo rendimiento en una placa base independientemente del fabricante de la placa base.