Hace un año recogimos algo que no nos dejó tranquilos: las armas nucleares de Estados Unidos se contralaban con ordenadores de hace 40 años y con disquetes. A pesar de que el país ha renovado parcialmente este aspecto, un nuevo problema está empezando a cobrar protagonismo: el uso generalizado de Windows XP en buques de guerra en países como España o Reino Unido.
En Reino Unido, el buque de guerra más grande y caro del país funciona con Windows XP. Hablamos del portaaviones HMS Queen Elizabeth, con un coste total de unos 4.000 millones de euros. La construcción de este buque fue iniciada en 2009, y fue botado en 2014. Será entregado este mismo año, y entrará en servicio en el año 2020.
con mucha automatización, me temo que también hará uso de Windows XP en sus ordenadores por las fechas en las que fue completado.
Microsoft debe hacer algo para evitar esto
El problema de todo este asunto es que estos buques requieren una gran planificación, y desde que se inicia su construcción hasta que entra en uso pueden llegar a pasar 5 o hasta 10 años. Para entonces, la versión de Windows pensada inicialmente estará probablemente obsoleta, ya que la vida útil con soporte de seguridad de los sistemas operativos de Microsoft es muy corta. Windows XP duró 13 años, mientras que Windows 7 durará sólo 9. Windows 10, según los planes de Microsoft, durará 10 años.
Por ello, Microsoft debe plantear la creación de versiones con un soporte extendido para este tipo de casos, ya que en el caso de un buque de guerra adaptar toda la estructura a un nuevo sistema operativo es algo muy costoso.