A la hora de tener una conexión local, lo mejor es conectar por cable el máximo número de dispositivos posible, ya que el WiFi es inestable, tiene pérdidas, y además en la mayoría de routers antiguos se satura con facilidad. Por ello, el cable Ethernet es la mejor opción, ya que es siempre seguro e inmune a interferencias de radio (aunque evita ponerlo cerca de un cable eléctrico por si acaso). Y si usas Link Aggregation es todavía mejor.
Link Aggregation: una buena solución para evitar congestión
A pesar de ello, el Ethernet puede encontrarse a veces con ciertos límites. Mientras que la mayoría de hogares cuentan con conexiones de 1 Gbps, esta velocidad va a ser fácilmente saturable dentro de poco. En el caso de la fibra de 1 Gbps de Vodafone, sólo con la bajada se puede saturar un cable en la parte de bajada.
La segunda situación requiere una tarjeta de red que soporte varias conexiones Ethernet (algunas placas base soportan dos). Esto nos puede permitir ahorrar bastante dinero, ya que una tarjeta de red Ethernet 10 Gbps cuesta 250 euros, mientras que una con cuatro puertos Ethernet Gigabit se puede encontrar por 39 euros (compatible con 802.3), o incluso una de dos puertos Ethernet por sólo 36 euros.
Si queréis saber más sobre Link Aggregation, podéis visitar el siguiente enlace de nuestros compañeros de RedesZone, donde nos explican qué es Link Aggregation y cómo configurarlo en un switch D-Link DXS-1100-10TS.