Ya lo avisamos en verano, y se ha ido confirmando en lo que llevamos de año: 2017 ha sido un mal año para montarse un PC Gaming por piezas. La memoria RAM ha alcanzado los precios más elevados vistos en la última década, mientras que otros componentes como los SSD o las tarjetas gráficas no han parado de subir. Eso va a cambiar en 2018 después de Navidad.
La oferta superará a la demanda a partir de 2018
DRAMeXchange hace análisis periódicos sobre el hardware, incluyendo la DRAM, los chips flash NAND, almacenamiento, etc. En las últimas predicciones afirmaron que el
La bajada de la demanda en ordenadores, tablets y móviles se estima que será de un 15% en el primer trimestre de 2018 comparado con el cuarto trimestre de 2017, debido sobre todo a los efectos de la Navidad en las compras de los s. En total, la caída será de hasta un 5% en el total de la industria.
La producción de 3D NAND seguirá creciendo en 2018
Con respecto a la oferta, la producción de memorias 3D NAND se está estabilizando y se espera que crezca un 5% en el primer trimestre de 2018, por lo que habrá un exceso de oferta. En este 2017 la industria ha estado en plena transición, pasando de producir 2D NAND a 3D NAND (más rápidas, con más capacidad de almacenamiento en el mismo tamaño, y más eficientes). Esta transición ha supuesto una disminución en la oferta, a la vez que aumentaba la demanda de muchos fabricantes para SSD o móviles (sobre todo chinos).
A pesar de que el precio no ha parado de subir, actualmente ya ha alcanzado su precio máximo, debido a que los precios actuales son los máximos que pueden permitirse los fabricantes después de un periodo constante de subidas.
En definitiva, a partir de 2018 nos vamos a encontrar unos precios finales que van a ir bajando conforme avance el año en teléfonos móviles, tablets, SSD, RAM o tarjetas gráficas, o productos que mejorarán sus prestaciones, como móviles con memorias UFS más rápidas, más SSD por PCI-e, tarjetas gráficas con más GB de VRAM, etc. De cara a la segunda mitad de 2018, es posible que la industria reduzca la oferta para evitar que los precios caigan demasiado, aunque habrá que ver cómo avanza el año.