El nuevo Call of Duty introduce muchos cambios en su «Battle Royale» para competir con Fortnite

Así, por primera vez en años, el nuevo Call of Duty tiene algo verdaderamente nuevo: un modo Battle Royale como Fortnite o PlayerUnknown’s Battlegrounds. Todavía cuenta con sus modos multijugador tradicionales, pero la principal novedad, como decimos, es el modo Battle Royale: Blackout.

Este se podría considerar como una versión innovadora de todo ello, en lugar de la imitación que muchos esperaban. Para empezar, diremos que el mapa de Blackout sigue siendo enorme, pero es lo suficientemente pequeño como para atravesarlo en una sola partida, y aunque no hay un autobús volador ni nada parecido, es bastante fácil ir de una zona a otra mientras nos detenemos en el camino para abastecernos de elementos como armas.

Además, para muchos los vehículos de Call of Duty son mucho mejores y más fáciles de conducir que en cualquier otro juego con modo Battle Royale, donde encontramos dos vehículos terrestres y un camión. Decir que el denominado como ATV es muy rápido y versátil, por lo que nos permite desplazarnos con increíble agilidad por todo tipo de terrenos.

Otra diferencia que se ofrece es aquella que se refiere a la curación de los jugadores en las partidas. Mientras que en Fortnite intentamos eliminar al enemigo mientras construimos rápidamente, si nos quedamos sin salud, lo mejor es crear un refugio, escondernos e intentar recuperar la salud con pociones, algo similar a lo que sucede en PUBG. Sin embargo en Blackout la curación es muy rápida y es algo que se asigna directamente a un botón de forma permanente, por lo que podremos sanar hasta la salud original y completa, o un poco más allá, todo ello de manera casi inmediata.

Para terminar, diremos que se ha eliminado el botín de armas codificado por colores de Fortnite, por lo que solo hay un tipo de botín «raro» en Blackout, las armas de oro.