2020 será el año en el que el 5G empiece a llegar en masa a nuestras vidas, ya que va a poderse empezar a operar en la banda de 700 MHz, además de que decenas de nuevos móviles lanzados este año incorporarán esta conectividad. Sin embargo, el mundo de la pseudociencia vuelve a atacar a esta conectividad alertando de sus “posibles” efectos adversos para la salud a pesar de no haber evidencia científica consensuada de que eso sea así.
El Ayuntamiento de Barcelona dice que el 5G genera problemas para la salud
Ha sido el Ayuntamiento de Barcelona el que ha publicado esta semana un artículo titulado “
El summun del artículo es cómo intentan demostrar los efectos adversos del 5G o de la radiación electromagnética, citan que la IARC añadió en 2011 la radiación electromagnética al grupo 2B de posibles cancerígenos, donde se encuentra el aloe vera o los polvos de talco. Luego, cita la Resolución 1815 del Consejo de Europa, que no es más que una declaración política sin ningún tipo de aval científico, por lo que no es una cita que refuerce de forma válida el argumento.
A su vez, dicen que hay “más de 10.000 estudios” que demuestran los efectos adversos de la radiofrecuencia. Lo que no explica son las cantidades a las que se expusieron los sujetos para provocar efectos, además de enlazarse a menos de una veintena de esos 10.000 artículos. Y hemos de tener en cuenta que la radiación no ionizante sí puede tener algún efecto al ser usadas para transmitir energía. Otra cosa es que ese efecto no sea nocivo. El ejemplo más claro lo tenemos en los microondas, que usan ondas de 2,4 GHz (sí, como el WiFi) para «excitar» las moléculas de agua, que como consecuencia pasan a calentarse.
Por último, comentan algunas recomendaciones para solucionar los “problemas” que causará el 5G, como sumarse al movimiento Stop 5G, usar el móvil o tablets sólo cuando sea necesario, apagar el WiFi y el móvil cuando duermes, usar el cable en lugar de dispositivos inalámbricos (como Ethernet en el PC o cable en el ratón), o no llevar el móvil cerca del cuerpo.
En la parte final especifican que el artículo se ha elaborado con la colaboración de Carmen Ruíz Martín, médico de familia del CAP Indianes, que también es mencionada en otro artículo en contra del 5G. Curiosamente, en ese mismo artículo se habla de que las ondas de radiofrecuencia que usamos a diario no son nocivas, y se pone claramente “Según la OMS, el 5G no es peligroso”.
Cuando este tipo de alertas las hace un blog magufo o alguien desde su cuenta de Twitter, con no hacerle caso es suficiente. Pero es realmente preocupante que desde una institución pública con alcance a millones de personas en España como es el Ayuntamiento de Barcelona se esté creando una alarma social en base a nada, ya que no tiene ningún aval científico. Y son este tipo de casos los que luego pueden llegar a provocar que se dejen de instalar antenas, y cuando alguien tenga una emergencia de salud de verdad y no tenga cobertura para llamar a los servicios de emergencia, entonces se podrá afirmar lo contrario: que la ausencia de 5G no es inocua para la salud. Deberían echar más horas alertando de riesgos de cosas que sí causan daños en la salud, como la radiación ionizante del tabaco por el polonio y el plomo radioactivos que lleva.
Actualización: El artículo ha sido borrado. Como sabíamos que lo iban a borrar, subimos el artículo a Wayback Machine, donde puede seguir consultándose.