¿Cómo enviamos contenidos de un ordenador a otro cuando uno de ellos tiene un sistema operativo Linux instalado y otro Windows? ¿Qué opciones tenemos para hacerlo? Podemos conectarnos por Bluetooth, además de utilizar un pendrive o de usar páginas específicas para la transferencia de archivos entre varios dispositivos. Puede que encontremos algún problema de compatibilidad y es mejor que tengamos varias alternativas para asegurarnos que alguna de estas funciona correctamente o, también, si se pretende dar con el método más cómodo y fácil de usar.
Con un pendrive o disco duro
Una de las mejores opciones a la hora de enviar o transferir archivos entre Linux y Windows es usar un pendrive o una unidad USB que podamos utilizar para transferir de uno a otro ordenador. La gran ventaja de esta opción es que podemos escoger el tamaño del pincho USB que vamos a utilizar. Podemos usar 8 GB, 16 GB, 18 GB o lo que nos haga falta y bastará con conectarlo a un ordenador y otro para transferir.
Si tienes una unidad de memoria externa por casa, no tendrás que gastar ni un solo euro. Sin embargo, si no es así, entonces tendrás que invertir. Y en función de la capacidad de almacenamiento que necesites, el coste será diferente, mientras más GB te hagan falta, más cara será la unidad de almacenamiento.
La única cosa que debemos tener en cuenta es el formato del pendrive porque debe ser compatible con Windows y con Linux. Hay varios tipos de formatos disponibles para un pendrive y debemos asegurarnos de que podamos leer y escribir en ambos así que lo más recomendable es que apuestes pro FAT32 o por exFAT, compatibles con todos los dispositivos. Lo aconsejable es que apuestes por exFAT gracias a que esto nos permitirá no tener límite de gigas en el pendrive que utilicemos.
Puede ser útil tanto con un pendrive USB como si utilizamos un disco duro externo pero habitualmente puede dar problemas por la compatibilidad o el formato de las particiones así que no es el único recurso que tenemos para hacerlo.

Una vez que lo tengamos vinculado y conectado, solo tenemos que ir a Windows y hacer clic derecho sobre el archivo o carpeta que queremos enviar. Hacemos clic derecho y nos aparecerá un menú con opciones. Debemos buscar “Enviar a…” y aquí escogemos la opción “Dispositivo Bluetooth”. Lo seleccionamos de la lista previamente vinculada y simplemente debemos esperar que se complete la recepción desde el equipo Ubuntu desde donde la habremos confirmado y itido. Una vez que termine la transferencia ya habremos creado una red personal donde podemos enviar tantos archivos como queramos sin ningún límite ni problema.

Ahora bien, si por cualquier motivo uno de los dos PCs no tiene conexión por Bluetooth, ten en cuenta que hay pequeños adaptadores que van conectados al puerto USB del ordenador para que este pueda disfrutar de la conexión Bluetooth.
Otras opciones de transferencia
No es la única opción que nos ofrece la posibilidad de transferir archivos entre varios dispositivos independientemente de su sistema operativo.
Hay otras herramientas como Send AnyWhere que nos permite enviar archivos de hasta 10 GB de forma segura, con una transferencia cifrada con un código que deben utilizar un código al recibir el enlace. Send AnyWhere es multidispositivo por lo que podemos usarlo desde teléfonos móviles además de desde un ordenador Linux o un ordenador con SO Windows. Además, también tiene una versión Pro que nos permite espacio ilimitado y hasta 1 TB de almacenamiento en la nube. También permite enviar los contenidos a través de aplicaciones de mensajería, hacer comentarios en el archivo o acceder a otros servicios. No necesariamente debemos tenerla exclusivamente para enviar archivos de Linux a Windows pero si tienes este tipo de servicio podemos aprovecharlo para transferir documentos entre dispositivos.

También otra opción es Transfer XL donde podemos añadir archivos y enviarlos. Permite enviar archivos gratis desde cinco gigas que son totalmente gratuitas aunque tiene la posibilidad de pagar por el servicio para enviar archivos de hasta 100 GB. Com en el caso anterior no es una opción recomendable si simplemente queremos usarlo con este fin pero puede ser una idea que podemos tener en cuenta si la usamos en nuestro día a día y queremos transferir.

Y no solo esto, sino que si tienes una cuenta de Google, tendrás a Drive. Por lo que es otra nube de almacenamiento desde la que podrás ir compartiendo archivos de Windows a Linux sin inconvenientes. Al tener una cuenta, tienes de manera gratuita a 15 GB. En caso de que se te queden cortos, tendrás que pagar por uno de los diferentes planes para ampliar el almacenamiento.
A través de red
Es una opción más compleja que las anteriores pero también una posibilidad si queremos transferir archivos de uno a otro. Podemos compartir una carpeta de Linux con Windows en LAN pero debemos seguir unos pasos e instalar un software específico: SAMBA. A partir de ahí, son muchas las posibilidades que ofrece esta herramienta en particular a la hora de compartir, por ejemplo, carpetas en la red.
Usa SAMBA
Hay que tener en cuenta que se trata de un programa que nos permitirá conectarnos e interactuar con las redes de Windows desde distribuciones Linux y simplemente lo instalaremos a través de un comando:
Sudo apt install samba
Cuando ya lo tengamos, podremos compartir carpetas desde Linux. Simplemente debemos abrir el explorador y encontrar la carpeta o ar4chivo correspondiente que nos interesa y que queremos transferir. Hacemos clic en el botón derecho de la misma para que aparezcan las diferentes opciones y encontraremos “Recurso compartido de red local” en el menú.
Una vez que lo tengamos y que hayamos instalado samba, simplemente debemos elegir las opciones que corresponden para compartirla y que nos permite que la carpeta se añada a SAMBA y el resto de los equipos conectados a la de puedan automáticamente acceder a la misma. Para ello, debemos abrir el explorador de Windows y escribir en la barra de direcciones la IP del ordenador con Ubuntu. Una vez que lo hagas, Windows encontrará el equipo y nos mostrará qué carpetas tiene compartidas así que podremos cogerla, descargarla.
Compartir una carpeta
Una de las posibilidades que se tienen disponible es la oportunidad de compartir una carpeta desde Ubuntu. Para ello, lo primero que se debe hacer es abrir el explorador de archivos y buscar la carpeta que se quiera compartir. Una vez aquí, habrá que hacer clic derecho sobre el documento en cuestión y elegir la opción Recurso compartido de red local.
Como ya se tiene instalado el paquete Samba, entonces no habrá que instalarlo. Y es que desde esta opción de Ubuntu nos pedirá que se instale. Luego, habrá que marcar la pestaña de compartir esta carpeta, dentro del asistente de Ubuntu para que esta se añada a Samba. Con esto conseguiremos que los demás equipos conectados a la misma red se puedan conectar a ella.
Y si quieres, para que sea más fácil de distinguir del resto, siempre se puede modificar el nombre de la carpeta en cuestión y hasta añadir una breve descripción dentro del apartado de Comentario.
Además de todo lo anterior, este sistema no da la opción para que los invitados se puedan conectar a la carpeta. Si se quiere que cualquier pueda entrar o hasta que otros s puedan subir archivos en esta, habrá que configurar un apartado más: Permitir a otras personas crear y eliminar archivos de esta carpeta y invitado. Para terminar, hay que tocar el botón de Crear compartición para que la carpeta empiece a estar compartida en la misma red.