Windows no es el único sistema operativo que puedes utilizar en tu ordenador de sobremesa o portátil, como bien sabrás. Puede que quieras probar otro sistema operativo antes de dar el paso y comprarte un nuevo equipo, en ese caso puedes usar una máquina virtual para poder comprobar si te convence o no. Por eso, hoy te explicamos cómo instalar una máquina virtual de macOS en Windows.
Windows siempre ha sido el sistema operativo más utilizado no solo en nuestro país, sino en la inmensa mayoría de los territorios del mundo. Sin embargo, esto no quiere decir que no existan otras alternativas que puedan ser tanto o más interesantes.Y, de hecho, durante los últimos años han aumentado su popularidad de manera considerable, extendiéndose hasta una gran cantidad de s, como es el caso de macOS.
En contra de la creencia general, no es necesario tener un ordenador de Apple para poder disfrutar de todos los beneficios que nos proporciona este sistema operativo. Y, de hecho, podemos hacer lo propio desde un PC sin necesidad de desinstalar Windows. Aunque, eso sí, tendremos que asumir ciertas limitaciones y que, además, el proceso de instalación no es todo lo sencillo que nos esperamos, especialmente si lo comparamos con otros SO.
En el caso de macOS lo tendremos algo más complicado que con otros, como Linux, ya que se trata de un sistema cerrado para el que nos resultará algo más complicado encontrar soporte. Pero se puede, puedes tener macOS en Windows. Para ello, tendremos que saber utilizar una máquina virtual.
¿Qué es una máquina virtual?
Una máquina virtual en Windows nos permite utilizar otro sistema operativo sin necesidad de instalarlo al completo y desinstalar el de Microsoft para probarlo. Por ejemplo, como hemos dicho, si no sabes si comprarte un ordenador de Apple porque no tienes claro si sabrás o no utilizarlo. En ese caso, puedes probarlo en Windows usando una máquina virtual para decidirte. O simplemente porque quieres utilizar algún programa concreto que no está disponible en Windows. También para programadores que pretenden probar su sistema en todas las opciones posibles.
Como s, podremos hacer uso de este recurso como se un banco de pruebas se tratase. En este entorno, podremos utilizar nuestro sistema operativo con normalidad para, a posteriori, tomar la decisión que queramos a al hora de sustituir nuestro equipo de trabajo.
Ventajas
Hay muchas ventajas para utilizar una máquina virtual de macOS en Windows, pero la principal, como es lógico, es que tendremos una visión más amplia de los sistemas operativos o podremos utilizarlos sin necesidad de cambiar de ordenador una y otra vez. Podemos tenerlo todo en un mismo equipo, lo que hace más fácil el proceso. Eso nos quita que tengamos que desembolsar dinero para comprar un ordenador que lleve integrado ese sistema operativo independiente, aunque, si no es tu caso, siempre puedes explorar todas las funciones que este integra para hacerte una idea y en un futuro próximo adquirir un ordenador Mac si te ha gustado mucho la experiencia.
Otra de las principales ventajas que permite tener una máquina virtual de macOS en Windows es que podremos probar programas y aplicaciones que no están disponibles en nuestro sistema operativo. En este caso, podríamos usar software exclusivo para macOS y programas pensados únicamente para ordenadores Apple. Si eres desarrollador puedes probar lo que acabas de crear y así ver el resultado.
Además, en el caso de que quieras hacer uso de una máquina virtual, puedes estar seguro de que tu ordenador se encontrará bien protegido, pues si entra algún malware no afectará a tu equipo en ningún momento. La máquina virtual se instala de forma totalmente independiente y funciona como si se hubiese introducido un ordenador dentro de tu propio ordenador. Así que, a pesar de que necesitarás de los recursos de tu PC para ejecutar esta especie de segundo equipo, cualquier altercado que se produzca en él quedará completamente aislado.
Además, en el momento en el que quieras, podrás dejar de utilizarla y eliminar todos los datos que se han quedado registrados mientras utilizabas esta máquina virtual. Por lo que todo son ventajas a la hora de utilizar este tipo de fórmulas antes de decidirnos por llevar a cabo la compra definitiva.
Inconvenientes
Pero también hay inconvenientes y es que normalmente será peor el rendimiento que encontremos en estas máquinas virtuales que en el sistema operativo original. Si tu PC no es capaz de ejecutar con soltura una máquina virtual es porque tu hardware no es apto para este tipo de herramientas. No obstante, a pesar de que se pueden superar con creces los requisitos que solicitan los programas para instalar una máquina virtual, igualmente puede que tu ordenador no esté lo suficientemente preparado como para trabajar con dos sistemas operativos simultáneamente.
Relacionado con lo anterior, el consumo de recursos puede llegar a ser bastante elevado. La emulación de un software como es la máquina virtual condiciona un sacrificio extra que puede llegar a saturar el procesamiento del ordenador. En el caso de que tengas problemas para ejecutarlo, lo recomendable es no seguir con el proceso, pues dañaría varios componentes internos, como el procesador o la placa base.
Otro de los problemas es que el proceso no siempre es rápido ni sencillo. Instalar una máquina virtual no será como descargar una app en tu teléfono Android o un launcher. Por ello, también puede resultar algo complejo de usar, ya que requiere de unas bases prácticas bien aprendidas y puede llegar a parecer que el nivel de informática es más avanzado de lo habitual. Su configuración no es del todo sencilla y tener unos conocimientos previos es básico para su manejo.
Además, también puede que si nuestro ordenador no cumple con los requisitos mínimos necesarios, puede que notemos algunas ralentizaciones o fallos en el sistema, por lo que no siempre vamos a tener una experiencia completamente fideligna y, además, esto puede provocar un fallo en el rendimiento de nuestro sistema operativo original. Pero, en cualquier caso, siempre se pueden solucionar.
Programas para máquinas virtuales
Como te explicaremos más tarde, hay una serie de programas que podemos usar para tener una máquina virtual de macOS en Windows. Generalmente, no podemos hacerlo sin estos programas y el proceso es casi siempre el mismo: descargamos un programa, conseguimos macOS a través de una imagen ISO y lo configuramos. Hay varios programas entre los que podemos elegir, aunque generalmente hay dos que serán los más utilizados o los más sencillos: Virtualbox y WMWare. No solo te servirán para la máquina virtual de macOS, sino también para usar con Linux, por ejemplo.
Máquina virtual macOS en Windows
Más allá de escoger entre los programas anteriores, para tener una máquina virtual macOS en Windows necesitamos otro punto: necesitamos macOS. Una vez que cumplas con los tres requisitos siguientes, podrás seguir los pasos para hacerlo.
¿Qué nos hace falta?
- Tener un sistema operativo Windows instalado
- Descargar VirtualBox en tu ordenador
- Conseguir una imagen ISO de la versión que quieras de MacOS
Nosotros usaremos Virtualbox, una opción gratuita y probablemente la más sencilla. En el caso de Linux podemos utilizar máquinas ya creadas que solo debemos importar, pero con macOS no podremos hacer esto, necesitaremos crear la máquina desde cero. Para ello, necesitas conseguir la imagen ISO de la versión que quieras de macOS y posteriormente seguir los pasos que te explicaremos a continuación.
Crear máquina
- Descarga VirtualBox en tu ordenador
- Instálalo y empieza el programa
- Ve a “Nueva” en el menú superior de la pantalla

- Rellena los datos
- Nombre
- Carpeta de máquina
- Tipo
- Versión

- Toca sobre “Siguiente” o Next para ir configurando
- Elige la memoria RAM que quieres asignar a la máquina virtual

- Escoge el tamaño que tendrá en el disco duro (recomendado 20 GB)

- Pulsa en siguiente
- La máquina estará lista y podrás configurarla

Una vez que hayas seguido todos los pasos tendrás una máquina creada donde podrás configurar lo que quieras. Puedes tocar en “Configuración” para ir eligiendo todo lo necesario. Podrás elegir todos los parámetros que necesites o cambiar lo que has asignado previamente. Cuando ya lo tengamos listo, tenemos que montar la imagen ISO de macOS que previamente hayas conseguido para la máquina.
Podrás tener ya macOS en tu ordenador Windows y ejecutar las herramientas que quieras, probar los programas o hacerte la idea de cómo será este sistema. Pero, además, el mismo proceso podemos hacerlo para cualquier otra máquina virtual.
Máquinas virtuales .OVA
Si quisieras utilizar otro sistema operativo, como puede ser Ubuntu o Fedora, podríamos tener el proceso mucho más sencillo gracias a la pagina web descargarmaquinasvirtuales.com que tiene todo tipo de imágenes en formato. OVA que podemos descargar y usar con Virtual Box directamente. Puedes importarlas con el programa que has descargado en tu ordenador y los pasos serían mucho más rápidos. Si te interesa alguna de estas opciones, tardarás segundos:
- Abre VirtualBox
- Ve a Archivo y a Importar servicio virtualizado
- Busca el archivo descargado y descomprimido en tu ordenador
- Toca en “Reinicializar la dirección MAC de todas las tarjetas de red”
- Elige la opción de importar
- Espera unos segundos o minutos
- Toca en “Iniciar”
Como ves, es mucho más rápido. Pero solo te servirá si ya tienes las imágenes. OVA sin necesidad de crear manualmente la máquina virtual para macOS en Windows.

- Nombre
- Carpeta de máquina
- Tipo
- Versión



