Sin duda un elemento imprescindible para la seguridad activa y pasiva de un vehículo son los cristales o lunas que aíslan a los ocupantes del exterior. Las lunas evitan que el viento, el agua o algún insecto, nos afecte en la conducción de forma negativa. Los primeros parabrisas estaban formados por dos cuerpos enmarcados, fabricados en vidrio plano, donde pronto los fabricantes comprendieron que en caso de colisión los cristales eran un peligro. Y ahí entran las que se denominan láminas de seguridad para el coche.
Protege a tu coche con este sistema de seguridad
No cabe duda de que a lo largo del año nos pasamos muchas horas dentro del coche, en especial algunos colectivos como el de los transportistas y el de los taxistas, pero también el de los
Otro beneficio de contar con láminas de seguridad es el aislamiento acústico que se produce al interior del automóvil, lo que se traduce en viajes más placenteros y tranquilos. También destaca la protección contra los rayos UV, los que son tan dañinos para la piel y a los que se ven expuestos los conductores por largos períodos.