Los puntos de carga son uno de los factores más importantes a la hora de valorar la compra de un coche eléctrico. El disponer de una red amplia es primordial para conseguir una buena experiencia de uso del coche y a lo largo de las siguientes líneas quiero hablar sobre ello.
Lo habitual es que cualquier propietario de un coche eléctrico tenga un punto de carga en su garaje. Gracias a esto pueden cargar las baterías del vehículo durante la noche (con tarifas súper valle, donde el precio del kWh es mucho más barato) y así tenerla preparada para el día. Sin embargo, si vas a hacer un viaje largo o este es superior a la autonomía de tu batería, o simplemente esta no iba cargada y necesitas cargar tu coche eléctrico, tendrás que tener localizados los puntos de carga para que puedan sacarte de algún apuro. O para tus viajes a otros puntos de la geografía española o donde quieras.
Si has descubierto los beneficios de tener este tipo de vehículos, pero si el dónde cargarlo o qué hacer si te estás quedando sin energía son un inconveniente, puedes descubrir cómo conocer esta información en tiempo real.
Asimismo, y más si somos recién llegados a este tipo de movilidad, cabe mencionar que, a día de hoy, existen muchos lugares donde cargar tu coche, ya sea un eléctrico puro o híbrido (los enchufables PHEV, claro) para poder utilizarlo, incluso en largas distancias sin miedo a quedarte tirado. No tendrás que ir muy lejos para lograrlo, ya que cada vez son más los puntos de carga que se reparten por todo el país, así que podrás hacerlo fácilmente y con comodidad.
Tipos de conectores de carga para coches eléctricos
No solo hay un cargador universal para todos los coches eléctricos, sino que hay diferentes tipos de enchufe, como pasa con los teléfonos móviles o las tabletas. Esto nos puede suponer un problema porque no todos los puntos de recarga incluirá la misma tecnología. Cada marca puede apostar por una tecnología o estándar diferente según la región, por ejemplo. Los modelos y fabricantes japoneses priorizan el conector CHAdeMO pero los modelos alemanes apuestan por conectores de tipo CCS, además de otros conectores propios o privados. Aunque se busca un consenso, por ahora son muchos los conectores de carga de vehículos eléctricos y repasamos los que encontrarás en las distintas estaciones de todo el mundo.
Con todo, y sobre todo para la hora de disponernos a recargar el coche, es importante saber que primero deberemos enchufar el cable al punto de carga y después al coche. Para desenchufarlo, invertiremos el proceso. Igualmente, y como veremos con las diferentes tomas, antes de enchufarlo deberemos comprobar que tanto el enchufe como la instalación estén dimensionados eléctricamente para un uso intensivo.
Schuko o enchufe tradicional
El enchufe Schuko es el enchufe tradicional, el que usas cada día para enchufar cualquier aparato por casa o electrodoméstico. El diseño es el que conoces: ds polos principales que sobresalen. Es una opción que puedes ver como conector de coches eléctricas aunque o es recomendable porque la recarga será mucho más lenta que en otros casos. Este tipo de conector no está pensado para soportar cargas de más de 16A. Habitualmente no se pasa de 10A o 12A:
Además tampoco es recomendable por su falta de rapidez: cargar por completo un coche eléctrico con este tipo e conector puede llevarnos demasiadas horas así que no es lo mejor si tienes un coche eléctrico de gran tamaño. Sí podrías usarlo en caso de modelos muy pequeños (como los cuadriciclos) o en caso de otros vehículos eléctricos como motos o bicicletas. También puede ser útil en caso de que vayas a cargar un coche que no sea del todo eléctrico sino que sea híbrido pero lo puedas enchufar. No sólo es una recarga lenta sino que no tiene comunicación integrada.
Su diferencia radica, principalmente, en la hora en la que nos decidamos por cargar nuestro coche eléctrico en una electrolinera, más ahora teniendo en cuenta la subida del precio de la luz. Esto nos lleva a otro punto, y es que no: no cuesta mucho más que hacerlo con un vehículo diésel. En su caso, lo normal es que si tenemos en cuenta un precio de unos 0.29 céntimos el kWh, cargar la batería del coche eléctrico con sus 50 kW nos supondrá un coste de unos 14,50 euros.
Actualmente, como destacaremos más abajo, existen suministradores que tienen notorias diferencias de precios. Los más conocidos (y más vistos) son los de Iberdrola, Repsol o Endesa X. También se hallan los de ámbito privado como el de Tesla y sus Supercargadores, que actualmente cuentan en España con una treintena de puntos repartidos por todo el territorio, y una pléyade de puntos de carga en destinos asociados.
Para ello, es necesario que conozcas, además, qué tipos de cargas te encontrarás en la electrolinera para cargar tu coche eléctrico. En este sentido, además, es factible que se encuentren algunos puntos con carga gratuita, pero no todos.
En total hoy se constituyen cuatro modos de carga diferentes en los que cada uno de ellos tiene un nivel más alto o más bajo de la mencionada comunicación con la red eléctrica. Además, y dependiendo de si es mayor o menor, este necesitará complementos para establecer la comunicación entre el coche y la carga, aunque tampoco es lo habitual.
- Modo 1. El primero se caracteriza por tener una conexión a una red convencional con un enchufe de tipo Schuko. En este caso no hay una comunicación entre la red y el coche. En el Modo 1 es necesario que la instalación incluya una protección diferencial y magnetotérmica.
- Modo 2. Este se presenta con un nivel bajo de comunicación con la red. La conexión no es como en el Modo 1, donde el coche se enchufa directamente, sino que se necesita un cable con un dispositivo de control piloto para verificar la correcta conexión del coche a la red de recarga. En este modo la potencia que alcanza es de 7,4 kW en monofásico y de 22kW en conexión trifásica. Necesita también una instalación que incluya una protección diferencial y magnetotérmica.
- Modo 3. Más elevada que los dos anteriores, se necesita un dispositivo de control y protecciones dentro del propio punto de recarga, además de un tipo de conector específico para que la comunicación entre coche y punto de carga sea correcta. También se puede elegir la potencia a la que se cargará el vehículo. La potencia máxima de este modo es de 7,4 kW en monofásico y 22kW en conexión trifásica.
- Modo 4. Diferente a los tres anteriores, en este caso se recargará el vehículo mediante corriente continua. En este modo se soporta una potencia de hasta 50kW y solo se utilizará para la carga rápida.
Conviene tener en cuenta que las tarifas de las recargas de los coches eléctricos varían de forma considerable y este es uno de los motivos por los que resulta tan dificil anticiparse a este gasto. Por lo que lo que te recomendamos es que te descargues alguna de las distintas aplicaciones que existen en el mercado por parte de los distribuidores oficiales para entender cuáles son los precios que te vas a encontrar en todas las estaciones mencionadas previamente.
Carga normal o lenta
Es el habitual para el uso doméstico, pero algunas zonas también tienden a su disposición. En este caso, la potencia demandada por el vehículo es de 3,7 kW, por lo que el tiempo de carga del vehículo es de 8 horas. Este modo de carga equivale al tipo de carga 3. La carga lenta se realiza siempre con corriente alterna.
Aquí, además, puede ser que nos encontremos con que la recarga llegue a ser gratuita. Muchos establecimientos lo ofrecen como reclamo y fidelización para sus clientes. También es frecuente encontrarse este tipo de recarga en parkings privados (esta vez de pago) donde los coches van a pasar varias horas.
Carga semirápida y rápida
En el caso de las velocidades más rápidas, tenemos dos variantes: semirápida y rápida. Para la primera, la potencia demandada por el vehículo es de 7,4 kW, por lo que el tiempo necesario para cargar el vehículo completamente sería de unas 4 horas.
Este tipo permite realizar una carga de forma más rápida que con la carga lenta sin necesidad de una instalación trifásica. Este modo equivale al tipo de carga 3 y se utiliza generalmente en supermercados, oficinas, empresas de flotas de vehículo y zonas de ocio. En la carga rápida es posible trabajar con corriente hasta 400 A. Por lo general, la carga rápida demanda 50 kW, permitiendo una carga en algo más de media hora. Utiliza siempre corriente continua y debe disponer de un conector ChaDeMo o CSS Combo.
Aquí ya no será tan habitual encontrarnos con puntos gratuitos en la electrolinera para nuestro coche eléctrico. Según el proveedor, podemos frecuentar algunos precios en estas estaciones de servicio para vehículos electrificados.
- Ionity. 0,37€/Kw – 14,2€/100km
- Endesa (X). 0,35€/kW – 7,84€/100km
- Repsol. 0,47€/Kw – 7,2€/100km
- Wenea. 0,45€/Kw – 7,2€/100km
- EMT Madrid. 0,40€/Kw – 6,4€/100km
- Iberdrola. 0,25€/Kw – 4,8€/100km
- EasyCharger. 0,39€/Kw – 4,8€/100km
- Tesla. 0,29€/Kw – 4,64€/100km
Ten en cuenta que la carga rápida pued eprovocar que se degraden más de la cuenta las baterías. Y esto puede perjudicar a la vida útil del vehículo en cuestión. No obstante, también cuentan con la ventaja de que vas a poder recargar el coche en el menor tiempo posible, por lo que deberás tomar tú la decisión.
Parkings de carga para coches eléctricos
También es posible hacerlo cuando no se tiene un garaje propio con enchufe. O lo que es lo mismo: no es estrictamente necesario contar con una plaza en nuestro edificio, sino que también podemos hacerlo de la mano de los diferentes puntos que se encuentran en el entorno urbano.
Es así que con los parkings situados en el centro de las ciudades ya se permite a los s la carga de sus coches eléctricos sin plaza de aparcamiento, y tenerlos siempre listos para circular. A partir de ahí existen diferentes propuestas (a cada cual más atractiva) que hacen porque la tarea sea no sólo más segura, sino incluso más accesible.
En la actualidad es bastante común ver iniciativas en grandes superficies, hoteles o zonas comerciales en las que se ofrece la posibilidad de recargar de forma gratuita nuestro automóvil moderno durante el tiempo de estancia/compra. Una fórmula que permite atraer nuevos clientes enfocándose en las nuevas necesidades de la movilidad eléctrica. Presentándose como una idea sostenible, contamos con más de una solución a modo de infraestructuras.
Lo cierto es que los coches eléctricos ya no son una opción cara solo apta para s acaudalados. Ahora es una opción asequible a prácticamente todos los bolsillos y hay cada vez más vecinos que desean disponer de un punto de recarga para su coche eléctrico en su plaza de garaje de la comunidad de propietarios.
Pero no es la única. Bien mediante los puntos en casas unifamiliares, en flotas de vehículos de la empresa donde acudamos a trabajar, en la vía pública… contamos con una serie de bases a modo de soporte para nuestras cargas que se encuentran repartidos por varios puntos. Esto hace que hace, pese a que todavía se dan con unos números de red escasa, es bastante frecuente que demos con ellos de una manera fácil y cercana.
- Puntos de recarga en casas unifamiliares. Es la mejor solución para recargar la batería del coche a un coste muy bajo.
- Puntos en comunidades de vecinos y garajes comunitarios. También se pueden instalar en parkings comunitarios en edificios de viviendas. Es igual de sencillo que en una casa unifamiliar.
- Puntos en flotas de vehículos. Instalar un punto de recarga en el propio parking de la empresa donde aparca la flota es una gran opción para que los conductores profesionales consigan ahorrar en su factura eléctrica.
- Puntos en la vía pública. Son estructuras de red de recarga geográficamente localizadas para poder abastecer la creciente demanda del coche eléctrico, que queda establecida en las líneas estratégicas y planes específicos de movilidad sostenible municipales o supramunicipales.
- Puntos en centros comerciales. A medio camino entre la instalación en la vía pública y en parking comunitario, esta es una estrategia que sigue sumando adeptos. Los clientes dejan su coche cargando en el parking mientras disfrutan de una tarde de compras o de cine.
¿A qué hora sale más barato cargar un coche eléctrico?
Si tenemos un coche eléctrico en casa, es muy probable que nos interese contratar una tarifa de luz específicamente enfocada a ello. Este tipo de tarifa se adapta a la discriminación horaria, con tres segmentos específicos, cada uno con sus propios límites y con un nivel medio de precios (que va fluctuando día a día). Aquí viene lo importante para saber a qué hora cargar el coche eléctrico.
- Periodo supervalle de 01:00 a 07:00 de la mañana.
- Periodo valle de 07:00 a 13:00 de la tarde y de 23:00 a 01:00 de la madrugada.
- Periodo punta de 13:00 a 23:00.
En tanto que la carga del coche eléctrico se puede programar, podemos conseguir un ahorro de hasta el 60% en la factura de la luz aprovechando el período supervalle, es decir, cargando nuestro vehículo eléctrico desde las 01:00 hasta las 07:00 horas. Mientras tanto, tendremos también los segmentos desde las 07:00 a 13:00 y de 23:00 a 01:00 horas en período valle con un precio moderado, pero no tan reducido.
En relación a esto, tenemos que saber que el precio que terminamos pagando, eso sí, dependerá en ambos casos de cómo sea la capacidad de la batería de nuestro coche electrificado y de cómo hayan ido los precios de la electricidad en el mercado mayorista a lo largo del día anterior.
Es probable que la tenencia de un coche eléctrico provoque tener que avisar al proveedor para que aumente la potencia contratada. ¿Por qué? Pues porque no sería muy cómodo tener que desconectar continuamente la gran parte de nuestros electrodomésticos y dispositivos para cargar las baterías del automóvil. Es por esto que, aunque bien es utilizada, no es tan frecuente como la corriente trifásica.
Corriente trifásica
Mucho más efectiva y recomendada para realizar las cargas de electricidad y voltaje de nuestros coches eléctricos, se recomienda especialmente para aquellos que tengan contratados más de 10 kW. Es requerida, en su caso, para los que puedan necesitar más potencia para su funcionamiento, que sí que requieren de este tipo de modalidad.
Aquí entran los conocidos Wallbox, o estaciones de recarga. Estos son los que suelen itir ambas opciones (monofásica y trifásica), aunque la segunda tiene la ventaja de que es capaz de rendir con potencias más altas y, por lo tanto, conseguirá que la recarga de nuestros automóviles se haga en tiempos bastante menores.
Lo que afecta a su velocidad de carga
Cuanto más grande sea la batería, más tardará en cargarse. Es sencillo, pues, como decimos, el estado de carga de la batería de un coche de estas características se mide en kilovatios-hora (kWh), que es similar a un litro pero para la electricidad, y cada kWh equivale a la cantidad de energía que usaría para hacer funcionar un electrodoméstico de 1000 vatios (W) durante una hora.
La gran mayoría de las baterías de los vehículos eléctricos de hoy en día pueden almacenar entre 25 y 100 kWh cuando están completamente cargadas. Ante esto, también hay aspectos que hacen porque esa velocidad de carga termine afectando, y el tiempo sea mayor del esperado.
- Capacidad de carga.
- Estado de carga. La cantidad de carga que tiene el coche cuando comienza la sesión de carga también influye en el tiempo que tarda en cargarse, dependiendo de si está vacío o lleno.
- Salida de carga de la estación. Cuanto mayor sea la salida de kW en una estación de carga, más rápido se cargará el coche eléctrico.
- Curva de carga. Con la carga de CA, el flujo de energía a un coche electrificado es plano (lo que significa que se cargará a la misma velocidad de 0 a 100%), mientras que con la carga de CC, la batería inicialmente acepta un flujo de energía más rápido y luego comienza a funcionar lentamente a medida que comienza a llenarse.
¿Es posible cargar un coche eléctrico con placas solares?
La velocidad con la que se quiere desdibujar los patrones tan arraigados de los combustibles tradicionales ha desencadenado un escenario de incertidumbre entre los conductores. Sobre todo porque cuestiones como el precio, la autonomía y la vida útil de las baterías de los coches eléctricos aún frenan a muchos s a dar el gran paso hacia la electromovilidad.
Por esto, para cargar el coche eléctrico la energía solar es perfecta. Las placas solares pueden instalarse en una vivienda (o en las diferentes y estaciones) y con ellas realizar la carga del coche eléctrico. Así, y con el futuro de las ciudades pasando por el uso de la energía cada vez más responsable, las nuevas necesidades eléctricas van direccionadas hacia la utilización de este tipo de energía en forma de abastecimiento para los electrificados más modernos.
Algo importante, y relacionadas con estos es, cabe mencionar que en España las energías renovables suponen alrededor de un 40% del mix eléctrico. O lo que es lo mismo: casi la mitad de la electricidad que llega a nuestros hogares proviene de renovables. Pero, ¿cómo se llega a que estas placas solares permitan recargar nuestro coche eléctrico? ¿cuál es el proceso?
- En primer lugar, la que es la más avanzada (y eficiente). La instalación de es solares fotovoltaicos en parkings, gasolineras, residencias o centros de trabajo. Éstos tienden a instalarse en lugares donde comúnmente se aparquen vehículos, de tal manera que la recarga provenga íntegramente de los es fotovoltaicos.
- En segundo lugar, tenemos coches que incorporan las propias placas solares. Es el caso de los modelos diseñados por Sono Motors y Lightyear, que permiten obtener unos 10-30 kilómetros de autonomía diarios adicionales dependiendo de las condiciones meteorológicas.
Para su funcionamiento, esta tendrá una determinada generación (por la mañana a las 9 de la mañana un 1%, a las 12 am el 100% de su capacidad y a las 18:00 el 1% otra vez). Si se consigue solapar la carga del coche con la generación fotovoltaica sí que se podría decir que estamos cargando el coche con energía solar, pero habría que ver la potencia que necesita ese coche y cuántas horas necesita de carga.
Para materializar la carga, y del que hoy es una de las técnicas más desarrolladas, se usa un inversor monofásico con cargador. El más novedoso, y por el que todo parece encaminarse es el SolarEdge, que llegó hace unos pocos años a nuestro país. Este es un producto que integra inversor y cargador de coche eléctrico en un único producto, permitiendo reducir la inversión requerida, ya que hace posible fusionar dos instalaciones en una, consiguiendo autoconsumo fotovoltaico y recarga de este con energía 100% renovable.
En todo caso, la pregunta que también nos haremos es una que seguramente muchos se estarán preguntando: ¿qué partido se le saca? ¿Qué beneficios encontramos en recurrir a estas placas solares para nuestro coche eléctrico frente al resto? Lo principal es que se trata de una posibilidad muy viable, rentable y en sí mismo es un concepto revolucionario.
Con todo, España es uno de los países con mayor proporción de estaciones de carga conectadas a la red (electrolineras), a la vez que el volumen de fotolineras va creciendo proporcionalmente con la venta de vehículos electrificados. Actualmente, y en lo que a placas solares respecta, podemos dar con tres ubicaciones para la recarga.
Una de ellas está en Madrid, en el Real Jardín Botánico Juan Carlos I, en la Universidad de Alcalá de Henares. En esta fotolinera se pueden recargar hasta 4 vehículos y 5 bicicletas eléctricas. Además, su puesto dispone de una aplicación para el móvil con el que mostrará el tiempo de recarga y la hora en que debe retirar el vehículo.
El proceso tiene un tiempo de duración de ocho horas a diez minutos, en función del sistema de recarga y la capacidad de almacenaje de la batería. Junto a ella se encuentran dos más: una en Barcelona, en el municipio de Molins del Rei, y que es la primera de este tipo nacida en nuestro territorio.
La siguiente está ubicada en Murcia, dentro de la Universidad Politécnica de Cartagena. Esta posee un sistema de acumulación de baterías y, además permite el monitoreo mediante aplicación móvil. Se constituyen 20 es fotovoltaicos de 250 Wp tienen la capacidad de producir energía con solo el 4 o 5% de radiación solar, con una potencia máxima de 6000 W y la potencia nominal del inversor de 10.000 w.