La era digital ha hecho que nos hagamos más de una vez la pregunta de si el dinero físico tiene los días contados. Actualmente, es muy fácil mandar dinero a través de transferencias bancarias, pagos con PayPal o Bizum, o utilizando decenas de criptomonedas diferentes. ¿Hará esto que desaparezca el dinero físico?
El dinero en efectivo ha sido, durante milenios, la única forma de hacer intercambios monetarios. Sin embargo, con la llegada de la era digital, los pagos físicos o en efectivo no han parado de caer. Pagar con tarjeta sin o, o enviar dinero a alguien con sólo conocer su móvil es mucho más cómodo y seguro que llevar cientos de euros encima.
Ventajas y desventajas de acabar con el dinero físico
Acabar con el dinero físico tendría multitud de ventajas. Se reducirían los robos y la pérdida de dinero, así como se acabaría casi de golpe con la economía sumergida. Sin embargo, también surgirían nuevos problemas, como que hay muchas personas sin cuentas bancarias ni dispositivos para realizar estos intercambios online. Y eso sin tener en cuenta que, si no tenemos cobertura móvil, no podríamos realizar ninguna transacción.
Por ello, el dinero físico no va a desaparecer nunca, pero sí que puede llegar a caer mucho su uso en favor de las criptomonedas. En las criptomonedas, sin embargo, no valdrá cualquiera, ya que por ejemplo el bitcoin o el ethereum son malísimas para hacer pagos recurrentes o de poca cantidad, ya que tienen unas altas comisiones; sobre todo en periodos de alta volatilidad.
pagos mediante criptomonedas. Este es el principal escollo que tienen que salvar las criptomonedas, ya que hasta que no se expandan como media de pago en una amplia mayoría de negocios, no van a llegar a plantearse como alternativa en el mundo real más allá de pagos anónimos entre particulares.