La tecnología inteligente y el hecho de estar todo conectado transformarán por completo nuestra experiencia y forma de vivir en la próxima década. Un informe de Vodafone denominado ‘The Connected Consumer 2030’ (CC2030) explora y nos da a conocer cinco tendencias clave que van a impulsar el mundo de la conectividad desafiando al cambio climático, el agotamiento de los recursos naturales o el envejecimiento de la población a nivel mundial.
Los dispositivos inteligentes serán vitales para el sector sanitario a la hora de detectar, controlar y prevenir enfermedades. También se destaca que los wearables podrían recibir órdenes a través de nuestros pensamientos o que los hologramas inmersivos y la Inteligencia Artificial (IA) serán capaces de convertir nuestros viajes del futuro en una experiencia totalmente personalizable. Lo cierto es que hoy en día la IA es capaz de hasta generar caras falsas y nos permite automatizar procesos que comúnmente se hacen de manera manual. El estudio publicado por Vodafone en colaboración con The Future Laboratory predice como la tecnología del futuro ayudará a mejorar nuestra vida cotidiana y a hacer frente a resolver los retos de toda una generación.
Los dispositivos inteligentes en el sector sanitario
La crisis sanitaria mundial de 2020 supuso la interrupción y colapso de los servicios sanitarios esenciales en el 90% de los países. Según Vodafone, en la próxima década nuestras casas estarán equipadas con dispositivos que monitoricen nuestra salud.
Estos dispositivos podrían diagnosticar afecciones detectando así problemas de salud a la vez que facilitaría un modelo de atención sanitaria preventiva que podría ahorra al sector sanitario 39.000 millones de euros al año. En el informe se predice que los espejos del baño podrían ser capaces de estar equipados con unos sensores que comprueben nuestro flujo sanguíneo o los cambios de color anormales de nuestra piel. Suena increíble pero los altavoces inteligentes también podrían solicitar una receta al detectar sonidos como la tos o estornudos.
Wearables controlados por tus pensamientos
Bajo la previsión de que el número de los dispositivos conectados alcance los 125.000 millones en todo el mundo en 2030 las soluciones inteligentes capaces de integrarse sin esfuerzo en la vida cotidiana serán clave en los próximos diez años.
Esta tendencia en España cada vez es más palpable, ya que el porcentaje de adopción digital de la población ha pasado del 84% al 96% como consecuencia de la crisis sanitaria vivida. Para 2030 puede que, en lugar de responder al sonido, lo wearables sean capaces de detectar las señales que el cerebro envía automáticamente a la boca cuando “decimos” palabras en nuestra cabeza, es decir, cuando pensamos. Esto abre un mundo a la posibilidad de
Datos personales como moneda
“A medida que aumente la concienciación sobre el valor de los datos personales, los futuros consumidores exigirán servicios y experiencias hiperpersonalizados a cambio de ellos”. Los datos personales podrían ser una moneda que las marcas podrían tener que llegar a pagar u ofrecer a cambio una experiencia elevada.
Por último, el informe CC2030 también explora los comportamientos humanos, incluyendo la preocupación por el bienestar físico y mental. Lutfu Kitapci, director general de Vodafone Smart Tech, afirma: “En los últimos dos años la conectividad se ha convertido en parte del tejido de nuestra vida cotidiana, ayudando a las personas a estar cerca de las personas y las cosas que más les importan y a resolver los retos diarios. Las conclusiones del informe ‘The Connected Consumer 2030’ ponen de manifiesto cómo está creciendo el ritmo de la transformación y cómo nos situaremos en el centro de la misma con nuestras soluciones de conectividad para ayudar a los gobiernos, las empresas y los consumidores a afrontar los principales retos de la sociedad”.