A estas alturas, todos conocemos la existencia de los números que empiezan por 800, 803, 806 u 807. Existen algunos que son de pago y no conviene llamar a la ligera sin antes conocer de qué tratan o si hay alternativas más asequibles o gratuitas. No todos los teléfonos cuestan lo mismo y muchas veces podemos optar por otras opciones que no tienen coste. Si no sabemos qué vamos a encontrarnos al otro lado de la línea exactamente ni si hay otros números, deberemos informarnos mejor, para evitar llevarnos un buen susto en la factura mensual de telefonía.
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), en un interesante ejercicio de pedagogía, detalla cinco aspectos que debemos tener en cuenta a la hora de querer realizar una llamada por teléfono a números desconocidos. Incluso aunque sean empresas oficiales, pueden llevarse un buen pico de dinero que nos pille por sorpresa a final de mes si no miramos bien antes de marcar.
Cada vez realizamos más trámites istrativos por Internet, compras online o cualquier otra cosa desde el ordenador o el móvil. No obstante, es normal que surjan dudas y, al no tratarse de procedimientos que hagamos presencialmente, la forma de resolverlas es por vías telemáticas, como las llamadas telefónicas. Como la mayoría de tarifas de telefonía ya incluyen llamadas ilimitadas, muchas veces marcamos sin tener en cuenta que hay números de tarificación especial con los que debemos tener cuidado sin no queremos tener un coste adicional en la factura mensual con nuestro operador.
902
Es uno de los tipos de números de teléfono que más dudas genera. De hecho, desde el pasado año no se pueden utilizar en los servicios de atención al cliente. En caso de hacerlo, la empresa deberá proporcionar al lado un número geográfico alternativo que sí esté incluido en la tarifa plana de llamadas. Estos teléfonos son “números de tarifas especiales sin retribución para el llamado”. El paga el coste de la llamada que luego se reparte entre nuestro operador y el operador de red. No debemos confundirlos con los 901 que son más baratos, aunque con un funcionamiento idéntico.
905
Como ya hemos explicado en la introducción, no todos los 900 son iguales. De hecho, los 905 son especialmente polémicos. Son los utilizados en televoto de concursos de televisión y se paga un importe fijo por llamada.
803
Dejando de lado los 901 o 902, sin duda los más conocidos números de tarificación adicional, tenemos otros que merecen nuestra atención. Por ejemplo, las llamadas al 803 estarán reservadas para servicios exclusivos de adultos y el coste de la llamada vendrá determinado por la cifra siguiente al 3, es decir, 803X. Si esa X es superior a 6 debemos autorizar expresamente el poder llamar ya que el coste es superior a 1 euro por minuto.
806
Lo mismo que en el caso anterior, pero relacionado con servicios de ocio y entrenamiento. De nuevo, mucho cuidado si la cuarta cifra es superior a 6, ya que podemos terminar pagando más de 1 euro por cada minuto de llamada.
807
El tercer caso aplicado para servicios profesionales. Insistimos en la cuarta cifra que será la que marque el precio de la llamada. Es posible que no podamos llamar si ni lo hemos autorizado expresamente a nuestra compañía telefónica.
118AB
Terminamos el repaso con los números cortos de servicios de información telefónica al . Aunque están en declive gracias al auge de Internet y su facilidad para encontrar cosas, todavía siguen existiendo. Su gran problema es que las tarifas no están reguladas e incluso permite la denominada “progresión de la llamada” por la que nos seguirán cobrando igual, aunque nos hayan pasado con un número regional. Si no tenemos más remedio que llamar, nunca aceptaremos que nos pasen, anotaremos el número, colgaremos y llamaremos por nuestra cuenta.