Los portátiles nos permiten trabajar fuera del hogar y son un elemento vital en la vida laboral. Una de sus ventajas es que no necesitan estar conectados todo el tiempo a la red, solo para cargar su batería, o, por lo menos, debería ser así. Lo cierto es que uno de los problemas más comunes con estos dispositivos es cuando no cargan ni siquiera conectándolos a la corriente. Sin embargo, hay soluciones para ello, a continuación, te las detallamos.
Antes de enumerar las posibles soluciones ante este rutinario problema, debemos asegurarnos de ciertos aspectos. Lo primero es comprobar que el cargador está bien enchufado tanto a la red eléctrica, como al portátil; no sería la primera vez que alguien lleva su ordenador hasta un centro de informática sólo para darse cuenta de que el problema es que no cargaba bien. Lo ideal en el caso de la corriente es que pruebes con varios enchufes, porque quizás el específico con el que lo sueles carga no funcione. Si definitivamente la batería no carga, estas son los posibles problemas y sus respectivas soluciones.
Seguramente la salud o capacidad total de la batería no responda al 100%, porque es uno de los elementos más rápidos en deteriorarse. Windows incorpora una periodización del rendimiento de la batería, así que podremos estimar su caída y adelantarnos a problemas futuros.
También podemos descargar programas gratuitos para monitorizarla. Podemos utilizar otros programas de terceros para hacer un análisis del estado de nuestra batería, y ayudarnos así a determinar si es problema de la batería o del hardware de nuestro portátil. Algunos de los más conocidos son:
- BatteryInfoView
- BatteryCare
- Mark BatteryMon
- HWiNFO32
- Pure Battery Analytics
- Save Battery
Este tipo de aplicaciones, algunas de las cuales podemos buscar directamente en la Microsoft Store, nos proporcionan información detallada sobre el estado de la batería, incluyendo su capacidad actual, número de ciclos de carga y tasas de consumo. Estas herramientas también permiten generar informes y gráficos en tiempo real para evaluar el rendimiento de la batería y detectar posibles fallos o degradación que no corresponda con la antigüedad de la batería. Asimismo, nos permiten identificar procesos y configuraciones que consumen demasiada energía, ayudándonos a ajustar configuraciones para disminuir el consumo y hacer que el portátil aguante más tiempo desenchufado.
Algunos de estos programas también nos permiten gestionar planes de energía y controlar la temperatura. Mediante ajustes como los modos de ahorro que reducen el brillo de la pantalla, la limitación de programas y procesos en segundo plano y otras configuraciones podemos tratar de prolongar al máximo la vida útil de la batería.
El software no responde
Antes de dirigirte a tu tienda de confianza para comprar otra batería o cambiar los conectores del ordenador, prueba con las siguientes soluciones centradas en el software, el cual puede fallar, corromperse o desactualizarse.
Lo más básico es comprobar si Windows detecta la presencia de la batería, para ello, clica sobre el botón Inicio > de dispositivos. Debe aparecer una lista en la que contenga «Baterías». Si no aparece, Windows no la detecta.
Tras realizar el anterior proceso, lo recomendable es actualizar la BIOS, o en la mayoría de casos. Podemos hacerlo mediante un software implementado en el ordenador o mediante USB y BIOS Flashback.