Instalar cámaras de seguridad en nuestro domicilio puede ser una buena solución si lo que estamos buscando es obtener un extra de seguridad en el interior de nuestro hogar. Históricamente, este tipo de dispositivos siempre han quedado relegados a los espacios exteriores, siendo muy habituales en viviendas de gran tamaño o con espacios exteriores que pudieran quedar desprotegidos. Pero, ¿qué ocurre cuando queremos instalarlas en el interior de nuestro hogar? Te lo adelantamos: Es un gran error. Y te contamos el porqué.
Durante los últimos años, muchos hogares han tomado la decisión de situar cámaras de vigilancia en el interior de los mismos. Tanto como
Además, centrándonos en la privacidad, las cámaras exteriores únicamente podrán dar información a los hackers de los espacios exteriores de nuestra vivienda. En ningún caso del interior de nuestra vivienda ni de las conductas que tenemos en la misma. Por lo que, a efectos prácticos, devuelven una información muy similar a la que obtendríamos en Google Street View.
En seguridad doméstica, opta por la eficiencia de los sistemas tradicionales
Si bien es cierto que estar al tanto de la innovación en cualquier sector es clave en términos de bienestar, no podemos afirmar lo mismo cuando se trata de algo tan importante como es la seguridad doméstica. Optar por cámaras de interior implica, en la mayoría de las ocasiones, afrontar un gasto que no termina de ser eficiente: por todos es sabido que no disponemos de capacidad de reacción las 24 horas del día, por mucho que nuestro teléfono móvil se encuentre siempre situado a escasos centímetros de nosotros.
Los sistemas de alarma tradicionales son capaces de detectar a posibles intrusos, disuadirlos por medio de diferentes sistemas y, en último término, avisar a las autoridades pertinentes. Además de resultar bastante más compleja su desactivación. Siendo una opción que, a día de hoy, continúa posicionada como una inversión mucho más rentable que el resto de las innovaciones que continúan emergiendo en el mercado y que a buen recaudo que en algún momento del futuro se situarán como la opción más segura y preferida por los s. Pero no en el momento de escribir estas líneas.