Las fronteras españolas por tierra o mar, en las islas y en Ceuta y Melilla, continúa fortaleciéndose con nuevas tecnologías diseñadas para detectar con mayor antelación la llegada de personas en situación irregular, pese a que el plato fuerte, la inteligencia artificial, se retrasa y aún no ha llegado a materializarse.
El sistema EES que prepara la UE
«El sistema registrará el nombre de la persona, el tipo de documento de viaje, los datos biométricos (huellas dactilares e imágenes faciales capturadas) y la fecha y el lugar de entrada y salida, respetando plenamente los derechos fundamentales y la protección de datos», recoge el portal de la Comisión Europea.
El objetivo es sustituir al sistema actual de estampado de pasaportes, que resulta ineficaz debido al alto tiempo que requiere, y a su incapacidad para reconocer a los que superan el tiempo máximo que tienen permitido permanecer dentro de las fronteras de un país.