Microsoft ha hecho una apuesta bastante arriesgada con Windows 11, donde no sólo ha hecho un cambio radical de interfaz, sino que también va a dejar a millones de ordenadores sin poder actualizar si finalmente obliga a tener compatibilidad con TPM 2.0. Incluso entre quienes tienen ordenadores compatibles puede haber mucho recelo para actualizar, pero Microsoft lo tiene todo planeado.
La mayoría de s ya ha visto imágenes de Windows 11, y algunos aventurados han instalado la versión para Insiders que Microsoft va a ir actualizando con regularidad para ir añadiendo pequeñas funciones y solucionando errores. Esta versión puede ser inestable, pero permite a quienes tengan curiosidad probar sus novedades.
10 días para revertir la actualización
E incluso si la versión estable no te termina de gustar, ya sea porque el menú de inicio es diferente, o porque la forma de gestionar las ventanas abiertas ha cambiado, Microsoft permitirá volver a Windows 10 durante los 10 días posteriores a la instalación de la actualización.
En el FAQ de Windows 11, Microsoft ha actualizado parte de la información, y afirma que tendremos 10 días para regresar a Windows 10 manteniendo archivos y datos de programas. Pasados esos 10 días, se borrarán todos los datos que permiten revertir la instalación, y en el caso de querer volver a Windows 10, habrá que hacerlo a mano.
ordenador viejo anteriores a 2016.
Microsoft capa elementos de Windows 10 en 11
Microsoft quiere cortar lazos con el anterior sistema operativo, y no quiere que los s estén haciendo mezclas en la interfaz con elementos de Windows 10. Así, hace unos días se descubrió que era posible usar el menú de inicio de Windows 10 en 11 creando una clave en el registro llamada Start_ShowClassicMode. Sin embargo, ahora crear esa clave en la misma ruta ya no funciona porque Microsoft ha capado la funcionalidad en cuanto ha visto que los s estaban haciendo el cambio en esta clave oculta.